viernes, 23 de mayo de 2014

Los Sueños



El mundo onírico ha sido y sigue siendo una incógnita todavía para científicos y estudiosos. Curiosamente, siempre se ha relacionado el Sueño con lo espiritual. El Espiritismo, como ya hemos visto anteriormente, está compuesto por tres pilares, uno de ellos es la Ciencia, por lo tanto también hay una explicación para este tema, al igual que para tantos otros.

A continuación, veremos la síntesis realizada por Allan Kardec sobre este tema, tras haber preguntado a los Espíritus sobre este tema y haber obtenido respuestas:


<<Los sueños son el producto de la emancipación del alma, que se torna más independiente debido a la suspensión de la vida activa y de relación. De ahí una especie de clarividencia ilimitada que se extiende hasta los lugares más distantes o que nunca fueron vistos, y a veces incluso hasta otros mundos. De ahí también el recuerdo que trae a la memoria los acontecimientos vividos en la existencia presente o en las anteriores. Esas imágenes extrañas de lo que ocurre u ocurrió en mundos desconocidos, entremezcladas con cosas del mundo actual, forman esos conjuntos extravagantes y confusos que parecen no tener sentido ni relación alguna.

La incoherencia de los sueños tiene otra explicación en las lagunas que produce el recuerdo incompleto de aquello que se nos apareció mientras dormíamos. Sería como un relato al que se le quitaron palabras o frases al azar: los fragmentos restantes, una vez reunidos, perderían todo significado razonable.>>

Los Espíritus nos explican, además, que a lo que llamamos dormir "no es más que el reposo del cuerpo, pues el Espíritu está siempre en actividad" y que nuestro espíritu encarnado viene a ser como un preso que, mientras el cuerpo duerme, recobra algo de su libertad. El Espíritu, en ese estado de "semi-libertad", aprovecha la ocasión para visitar o recibir visitas (ya sea tanto de espíritus encarnados como desencarnados), viajar a otros lugares e incluso recordar o vaticinar experiencias pasadas o futuras (como hemos leído más arriba en la síntesis redactada por Kardec).

No hay comentarios:

Publicar un comentario